martes, 15 de abril de 2014

En realidad nunca nos cansamos de esperar. A diga de hoy, sigo esperando un arrepentimiento, cuando soy yo la que se arrepiente de cada paso que doy. A ver si me va a hacer falta una buena hostia para aprender, y todo lo de hasta ahora fueron pequeños empujones hacia el abismo...

1 comentario:

  1. Cada paso que se da, sea en la dirección que sea, es un pequeño avance. Piénsalo así. A veces el abismo sólo existe en nuestra cabeza.

    ResponderEliminar

Tus comentarios, opiniones y el tiempo que me dediques siempre son bien recibidos.