Lo que tú no sabes es que cada vez que me hago la manicura, que me limo las uñas, pienso en ti. Y con segundas.
Porque mientras que mis uñas quedan perfectas, pienso en el momento en el que pueda clavarlas en tu espalda. Y en ella, marcada.
Y ya sé que soy un poco fiera y ya sabes que es tu culpa.
Pocas veces se dice tanto con tan poco. A afilar las uñas pues :-)
ResponderEliminarJo. M ha gustado. Me encanta tu blog, te seguiré cuando mi estúpido ordenador me deje, me gustaría muchísimo que te pasaras por mi blog, el tuyo me encanta y cuenta con que me pase a menudo. Un beso ENORME desde
ResponderEliminarhttp://somosabracadabrantes.blogspot.com.es