Me gusta sentir como recorre mi cuerpo, como es capaz de hacer que alguien se estremezca con solo unos segundos.
Me gusta la forma que tiene tan mágica de relajarme por momentos, de tensarme en otros muchos.
Me gusta que acaricie cada centímetro de mí.
Que me susurre al oído cosas prohibidas.
Que sepa adaptarse a mi ánimo.
Si existe algo perfecto que se adapte a cada momento, es ella.
La música es un amante más. Puede hacernos llorar. Puede hacer que sonriamos de la forma más tonta que existe cuando estamos solos. Nos inspira y se convierte en nuestra musa. Y no podemos imaginarnos nuestra vida sin ella, sin una banda sonora que la ambiente.
Por dios, que perfección.
ResponderEliminarTienes razón, la música es imprescindible.
ResponderEliminar*abrazos*